AA.VV
Imágenes olvidadas en un cajón, recuerdos enterrados de latidos acelerados, gritos de dolor, fluidos corporales, resuellos de cansancio, sollozos de sorpresa, soplos de consuelo y risas de felicidad. También de abismo, parir una vida es cambiar de vida. Un solo camino, encontrar novio y formar familia; reproducirse, participar sin hacerse muchas preguntas del gran proyecto heredado: la humanidad. Ser madre en tiempos convulsos, querer a las criaturas en un país silenciado por la crueldad. Instinto animal y solidaridad fraternal para sobreponerse a la ignorancia dominante, caminar por un falso paraíso terrenal. Parir una vida, parir la vida.