La inflamación aguda merma nuestro vigor y plenitud y, si no se trata a tiempo, puede cronificarse y afectar a todos los rincones del cuerpo. Por ello cada vez más científicos la acusan de estar detrás de transtornos como la diabetes, el Alzhe
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información